Se prevé que a lo largo de este año el turismo alcance unos niveles sin precedentes, impulsado sobre todo por la tecnología y una mayor conexión con los destinos a los que viajar.

El 2019 será recordado por la quiebra de Thomas Cook, la venta de Air Europa y la fusión de las divisiones emisoras de Globalia y Barceló, pero también nos deja un buen sabor de boca:  los españoles han destinado un total de 18.361 millones de euros a los viajes internacionales, lo que supone un aumento del 10,3% en comparación con el año anterior. Además, según las recientes conclusiones del estudio de Observatur, el segmento de los viajes de lujo está en alza, siendo muy dinámico y resistiendo perfectamente a los episodios cíclicos de crisis vividos los últimos años en España.

Es fácil constatar que se ha producido un cambio en las necesidades, deseos y comportamientos del viajero. El lujo ya no se entiende de la misma manera que en el pasado, se reconceptualiza y se apuesta por destinos naturales, por experiencias únicas, por productos y servicios con estándares que responden a la sostenibilidad. La preocupación por el medio ambiente es cada vez mayor y empieza a influir en las elecciones de los viajeros españoles, sintiéndose cada vez más responsables del impacto que generan en sus viajes y de la huella que dejan a su paso.

Maria Sánchez-Grela

General Manager Spain